En los finales del 2001 y principios del 2002, al igual que muchos, vimos disminuirse nuestros ahorros que se encontraban en bancos nacionales. Ahorros que nos costo mucho juntar.
Luego los precios de las casas en capital empezaron a subir ya que la gente, la que podía, sacaba la plata de los bancos y compraba ladrillos "como decia el abuelo los ladrillos siempre estan y cada vez valen más".
Y para lo único que nos alcanzó fue para comprar un terrenito en lo que creíamos que era San Vicente. El cartel decía "Chacras de San Vicente".
El vendedor repetía su discurso estudiado: "pronto va ha llegar el progreso; la auotpista ya esta trazada, en un par de años la comienzan a construir" y nosotros pensabamos si compramos acá es por como está y no por como será cuando llegue "el Progreso". Si compramos en San Vicente es por el verde, el olor a campo, la tranquilidad, las calles de tierra y, fundamentalmente, por no hay PROGRESO, es decir no hay ruido a motores, no hay bocinazos, no hay gente apurada, vecinos hacinados.
Y bue les presentamos... esto es lo que compramos
